sábado, 10 de enero de 2009

Algo

"a los autores de actos de violencia en los barrios de las grandes ciudades se los compara con los terroristas internacionales, movidos también únicamente por su identidad cultural y religiosa, es decir, por su pertenencia colectiva. Nuestros actos tienen razones, los de ellos sólo causas.
según pascal bruckner: "para poder mantenernos en el círculo de la razón (...) necesitamos a cualquier precio adjudicarle argumentos a los asesinos". O sea que, en realidad, ellos no tendrían argumentos, sólo pulsiones asesinas que los dirigen sin que se den cuenta. elie barnavi agrega: " ese tipo de terrorismo no logramos entenderlo, nos resulta radicalmente extraño". la fórmula debería ser invertida: es porque postulamos previamente que esos seres nos resultan completamente extraños - nosotros, libres, racionales, plenamente humanos; ellos decididos, irracionales, y por lo tanto incompletamente humanos que no logramos entenderlos (...) no es necesario evocar el islam ni el choque de civilizaciones para explicar por qué los afganos o los iraquíes resisten a las fuerzas militares en su territorio. ni hablar de antijudaismo o de antisemitismo para comprender las razones de los palestinos para no estar contentos con la ocupación israelí de sus tierras. ni citar versículos del corán para dar sentido a las reacciones de los libaneses que en 2006 resistieron a la destrucción de las infraestructuras de su país".

artículo aparecido en le monde diplomatique.

extraído de tzvetan todorov, el miedo a los bárbaros.


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