viernes, 19 de diciembre de 2008

"Dejadme la esperanza"

200 $ para que los juvilados se sientan integrados a la fiesta de Cristo, que no los abandona pero que pone precios en las canastas de su onomástico.
una redención: el sacrificio, amigos, en contextos de crisis lo emprenden los trabajadores.
la señal de la claudicación inexorable: el sindicalismo. teatralidad cool en las esferas del universo político.
la crisis en la sonrisa de la presidente. un espejo del deseo en su medida y armoniosamente.
alguien se llevó la marcha a su redil.
podrán oír los trabajadores del mundo?
¡unidos!
las palabras mueven montañas?
el trabajador, en argentina, no ocupó el espacio público. aun con el peronismo primigenio pudo lograr ocupar un espacio (más que simbólico) en la cosa pública. ese espacio lo terminó ocupando el líder.
la política se mueve y condensa en el plano de la retórica, vacía de poder los espacios simbólicos de aquellos que no son visibles ante la opinión pública, el nuevo circuito del poder.
hay algo que aun la democracia no pudo erradicar del consiente colectivo: el miedo.
el miedo elevado a la categoría de mito.
el marco regulador del miedo es la concepción teológica de la política, donde la evidencia mística regula las tendencias colectivas.
con miedo no hay esperanza. con miedo no hay crítica.
trabajamos para el miedo y por miedo.
ya no hay superhéroes que velen por nuestros intereses. el padre edípico de la política fue reconstruido, mutó, pero nunca dejó de ser edípico, castrador...
hay posibilidades, pero no hay conciencia...

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